El progreso trajo entre tantos otras cosas la velocidad y la novedad. Es decir, tenemos que adaptarnos raudos al febril cambio del mundo y sus avatares. No nos acostumbramos a algo que ya tenemos que cambiarlo o modificarlo por otra cosa. El sentido de perdurabilidad y costumbre por así decirlo se perdió y prospera la renovación y el cambio.
Dicen por ahí, que el ser humano ha sido diseñado para vivir en comunidades tribales, que no soporta el progreso, ¿Será cierto?
Ya no podemos matar al mensajero. Antes si la noticia era infortuna, se podía descargar el pesar contra el que nos traía el mensaje y en un acto de ira, aniquilarlo. Pero esto suele ser imposible hoy en día por la lejanía del que nos manda el mensaje vía sms, gracias a todos cambio para mejor y para el mensajero, claro esta.
Otro inconveniente es que ya no podemos declararle nuestro amor a Julieta en su balcón. ¿Y por qué? Por qué hay invadido tanto la ciudad que hasta tuvieron que correr a Julieta de su balcón y en su lugar poner un cartel de ¨Se vende¨ y otro de una publicidad de marcas extrañas.
Y hay que vivir civilizado y hay que dejar de comportarse como animales, por que como dije, ya no podemos matar al mensajero.
Hasta la próxima entrega,
Gasty
Matar al mensajero
|
|
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario